
30 en sus 30
El foco en género, tecnología y medioambiente
Consultamos a 30 profesionales del marketing y las comunicaciones sobre cuáles fueron este año sus principales logros, cuáles son los cambios sociales que les interesan y en qué podrían aportar al futuro a través de su trabajo. Los temas que más aparecen tienen que ver con la importancia de la tecnología en la vida de las personas, los avances en materia de género y diversidad, y la urgencia en dejar de perjudicar al medioambiente. También fueron temas puestos de relieve el movimiento Black Lives Matter, la igualdad, las infancias y los derechos humanos.
Sin dudas, este fue un año desafiante para todos, aunque cada uno se enfrentó a situaciones distintas. En nuestro caso, las restricciones de circulación sumaron algo de complejidad a la forma en que veníamos trabajando, pero a la vez la tecnología nos permitió encontrarnos con nuevas modalidades de trabajo en equipo. Creo que haber logrado una nueva dinámica, que permitió a cada uno, desde su situación particular, conectarse y generar un impacto positivo, fue uno de los logros del año. El uso de la tecnología fue fundamental para atravesar este camino. El otro logro, sin dudas, fue el de haber podido estar muy cerca, gracias a las herramientas de Google, de los profundos y radicales cambios que vimos en las conductas de los consumidores en estos tiempos inéditos y desafiantes.
Creo que una de las grandes palabras clave de este año fue “aceleración”. Para quienes estamos en digital, la aceleración que vimos en estos meses en la adopción de nuevos hábitos por parte de la sociedad y en la transformación de los negocios fue fenomenal. Me interesa mucho ver cómo la tecnología fue y sigue siendo una gran facilitadora de cambios que ya venían insinuándose, pero que se aceleraron dramáticamente este año y que todavía no sabemos hasta dónde llegarán. Cambios que no solo tienen que ver con el consumo, sino también con la forma de trabajar, de aprender, de hacer negocios, de relacionarnos y hasta de cuidar nuestros cuerpos y nuestras mentes.
Tengo la oportunidad de formar parte de una organización que está cambiando y mejorando mucho las vidas de las personas y que en esta pandemia hizo aportes muy importantes. Desde los Reportes de Movilidad, que ayudaron a gobiernos e instituciones a tomar mejores decisiones, hasta las herramientas de trabajo a distancia y colaboración de Google Workspace o las de Google Classroom, creo que cada producto de Google es un aporte muy significativo para ayudar a las personas a vivir mejor. Me gustaría que mi trabajo ayude a difundir estos aportes y que sirva para que cada vez más personas y organizaciones puedan conocerlos, entenderlos, aprovecharlos y adoptarlos para darles su propia forma también.

Este año el foco con todas las marcas de Godrej Argentina estuvo fuertemente apalancado en acompañar al consumidor en este momento tan particular de la historia. Tanto desde la comunicación de las marcas como desde los lanzamientos que tuvimos, nuestro objetivo fue no desestimar el contexto, entendiendo cómo desde las marcas podíamos aportar a la situación. Con ROBY, marca líder en styling en Argentina, incentivamos a salir del look de entrecasa y motivamos a los consumidores a crear estilos dentro del contexto. Sumado a esto relanzamos el tradicional spray fijador y nos renovamos con una nueva fragancia e imagen, que nos acerca al target disruptivo que ROBY quiere acompañar. Con Millefiori, marca líder de depilación de nuestra filial de Chile, lanzamos al mercado nuevas variedades que siguen construyendo el concepto de cruelty free, el cual la marca viene llevando de bandera en los últimos años desde ambos países. Villeneuve, por su parte, es la estrella de este año. En el contexto de emergencia sanitaria, lanzamos un portfolio de alcohol en gel y jabón antibacterial en tiempo récord para la compañía, y aceleramos los calendarios de innovación con el lanzamiento de cuatro variedades de jabones bajo el concepto de Skin Food. La marca busca tener un rol protagónico dentro del portfolio de Godrej, siendo la primera que navegará por fuera de las categorías core de la compañía.
El consumo masivo es un problema para el mundo y no digo nada nuevo contando del impacto que día tras día, como consumidores, vamos dejando en el planeta Tierra. Pero, a diferencia de muchos, no creo que la solución sea dejar de consumir. La humanidad progresó y año tras año supera la esperanza de vida promedio, alcanzando niveles nunca antes vistos. Esto se logró gracias a la calidad de vida y a muchos de los productos que hoy consumimos y producimos, como por ejemplo el protector solar. Basándome en este fundamento, no creo que la solución sea dejar de consumir y volver a la época de las cavernas, sino que debemos encontrar la forma de consumir más conscientemente y en este punto nosotros cumplimos un rol fundamental, ya que nuestro deber es poner productos que cumplan estos estándares al alcance del consumidor.
Me gustaría generar un cambio en todas las marcas con las que trabajo, haciendo una diferencia real en cuanto al impacto que dejan en el medio y en la sociedad que las consume.

Este año nos hemos encontrado con un desafío sin precedentes. Desde mi rol en Facebook, he tenido la oportunidad de acompañar al mercado de agencias en un camino de transformación digital que aún hoy continúa impactando sobre el negocio de gran parte de sus clientes. Con la pandemia de COVID-19, muchos anunciantes se volcaron a crear o mejorar su canal de ventas online y a incorporar nuevas tecnologías. Para acompañarlos, lanzamos espacios de consultoría y entrenamientos con los que logramos un mejor aprovechamiento de los productos de Facebook y que muchos anunciantes comenzaran nuevas conversaciones eficientes con sus clientes.
Creo que la tecnología tiene el poder de conectar y transformar comunidades. Cada vez más negocios deciden dar sus primeros pasos con una estrategia de comunicación digital o utilizando las herramientas disponibles. En la actualidad todos podemos generar un gran impacto en la comunidad, desde el lugar que cada uno pueda y con responsabilidad. Creo que pueden lograrse grandes transformaciones desde el aporte individual, como ayudar a un negocio de barrio, apoyar la diversidad e inclusión social y dar a conocer episodios de injusticia o inequidad. Nunca fue tan fácil conectarnos y ayudarnos, solo tenemos que dar el primer paso.
En el futuro me gustaría seguir acompañando la transformación digital de los negocios y la conexión entre las personas y la comunidad. Me parece valioso capitalizar los aprendizajes que hemos desarrollado este año, sobre todo la importancia de estar cerca de nuestros clientes y apoyarlos en sus desafíos comerciales. Existen y vendrán muchas oportunidades para aprovechar los perfiles sociales de las marcas y comenzar conversaciones a través de múltiples canales. Sin olvidar la importancia que tienen las conexiones con la comunidad a través de iniciativas como RISE, un programa que busca apoyar desde diferentes puntos de vista a las personas del mercado publicitario que han perdido su trabajo durante la pandemia.

Si bien la pandemia produjo un clima incierto para la industria publicitaria, necesitábamos generar negocios y nos lanzamos a producir branded content. El mérito no fue solo nuestro, sino también de los anunciantes que continúan apostando a este recurso tan valioso. Tuvimos un largo recorrido hasta hacer posibles nuestras ideas. El primer proyecto estuvo vinculado a la temática “diseño y deco” para el canal Home&Health, donde generamos 12 microepisodios conducidos por Angie Carminatti y Fernando Diez, una dupla de influencers asesores en decoración que trabajaron junto a las marcas de un sponsor multinacional de pinturas decorativas. Luego, de la mano de un sponsor de alimentos para mascotas, produjimos 10 cápsulas para el canal Animal Planet, en las que Marisol Rey brindó consejos de adiestramiento canino. Por último, para el canal Food Network, lanzamos un desafío de cocina de 6 episodios junto a tres anunciantes relacionados al mundo de la gastronomía, que tuvo como grandes protagonistas a la comediante Dalia Gutmann y al chef Rodrigo Cascón. La dinámica que envuelve este negocio nos activa, por eso estoy muy feliz de poder celebrar los éxitos junto a todos los colaboradores: anunciantes, agencias de medios, agencias de publicidad, productoras, talentos y, fundamentalmente, al equipo de profesionales de Discovery.
Hace varios años vengo trabajando con la industria infantil. Me interesa la evolución que viene sucediendo a nivel consumo, tendencias y productos que los niños adoran o descartan. La realidad es que los hábitos de consumo de medios y entretenimiento están cambiando cada vez más rápido, más aún en este target donde la audiencia se renueva constantemente. En este aspecto, considero que los medios tradicionales están frente a un contexto sumamente desafiante y se vuelve clave el nivel de investigación, para poder entender cómo funciona y qué motoriza la atención del consumidor.
Estoy muy agradecido de haber trabajado con excelentes personas y grandes profesionales de la industria publicitaria. En un futuro me gustaría aportar experiencias, los valores y las buenas costumbres que me acompañan y enriquecen la labor comercial.

Crecimos un 50% nuestro volumen de facturación con respecto al año anterior. Renovamos la confianza de todos los clientes más importantes de Ninch: MercadoLibre, Mercado Pago, Grupo L’Oréal con 15 de sus marcas y 3 divisiones, Reckitt Benckiser con 9 de sus marcas, Grupo Fratelli Branca, Omega, Molinos, Toyota, etc... Ganamos Grupo Arcor, y Grupo CCU con sus 30 marcas, sumamos la coordinación regional de L’Oréal Panamá, ganamos Oldelval, GUM, y Globant 😊
Por otro lado, fui nombrada como Titular de Cátedra en la UNLZ, en la materia Organización y Gestión de la Empresa de Comunicación, tarea que me desafía y me enorgullece. Reinventamos el área BTL de Ninch y creamos el área de Virtual Brand Experience y Streaming, desarrollando diversos eventos virtuales. Además, este año nos inspiró y creamos Ninch TV, un programa de contenido digital en YouTube; y Ninch Academy, un espacio de educación con un área de investigación académica, donde elaboramos informes de tendencias en comunicación, capacitaciones y cursos.
Me defino como una apasionada de la comunicación y quiero lograr cambios y transformaciones profundas, donde la educación sea el pilar fundamental para formar profesionales entusiastas y soñadores. Nuestro sueño es elevar la industria, devolviéndole su rol de relevancia y su centralidad para la construcción social. Para eso necesitamos que sea más grande, más fuerte, que los comunicadores tomemos mayor visibilidad en la esfera política, económica y social. Y hacia ahí vamos.
En Ninch seguimos innovando en formatos, sumando clientes y reforzando nuestro propósito de impulsar a los nuevos emprendedores de la comunicación, tarea que hago desde mi cátedra en la universidad pública. Nuestro sueño es convertirnos en la usina que abra paso a una nueva generación de emprendedores de la comunicación, formados para pensar y desarrollar estrategias con impacto integral. Por eso apoyamos a los estudiantes y a las generaciones más jóvenes, sobre todo de universidades públicas, que crean proyectos, son entusiastas y se atreven a soñar en grande. Les abrimos las puertas y los ayudamos a hacer, a romper las reglas, y a soñar.

Sin lugar a duda que, en este año tan particular, el más importante fue la posibilidad de continuar trabajando como siempre con el equipo y con nuestro equipo extendido, que son las agencias. En un plano más personal, el hecho de que hayan depositado en mí la confianza para liderar todo el contenido creativo y comunicacional de la marca Coca-Cola para SLBU y Coca-Cola Sin Azúcar & Coca-Cola Light a nivel LATAM. Finalmente, que nuestros trabajos sigan siendo reconocidos en los diferentes festivales.
Teniendo en cuenta nuestro rol de comunicadores, pienso que tenemos que estar atentos y abiertos a todo lo que sucede para aggiornarnos de la mejor manera y, después, poder guiar con el ejemplo desde el rol que nos toca como profesionales y también como marcas, productos y compañías. El empoderamiento de la mujer, la perspectiva de género y la sustentabilidad son los que más me conciernen. El hecho de que tengan un nivel de actividad tan alto ayuda mucho a profundizar e internalizar al respecto y, sin duda, todavía queda mucho camino por recorrer y aprender. Me gustaría que sean algo naturalizado y que no sigan siendo un tema de debate cuando mis hijos sean más grandes.
Generar un mundo más consciente: consumidores más conscientes, empresas más conscientes, pero sobre todo personas más conscientes.

Este fue un año sin precedentes, donde la empatía, la flexibilidad y la reinvención reinaron como los principales valores en cada uno de nuestros proyectos. Entendimos que los tiempos de la pandemia eran únicos; fue impresionante ver cómo el ánimo, el mood social y la opinión de las personas con respecto a rol de la publicidad cambiaba tan rápidamente. Creo que los estrategas nos convertimos en “termómetros” fundamentales en el día a día de nuestros clientes, interpretando la data y el pulso cultural para tomar decisiones importantes a la hora de comunicar. De los logros profesionales más importantes para el departamento de estrategia, destaco el haber estado muy atentos a estos cambios y, así, haber hecho una gran sociedad, tanto con el equipo interno como con los clientes, en el desafío de entender cómo estar ahí verdaderamente para las personas. También llegar a ese nivel de insight profundo y puntual nos brindó resultados sobresalientes en las diversas categorías y marcas con las que construimos. En la primera semana de la cuarentena, lanzamos un review / reporte que ofrecía un punto de vista, aprendizajes, reflexiones y posibles herramientas para ir navegando el contexto cambiante. “Miradas frescas” se convirtió en un reporte mensual que guio nuestra postura y marco de acción ante distintas problemáticas. Y algo de lo que me siento muy orgullosa este año es del crecimiento del equipo estratégico, no solo en el brand planning, sino también en la sociedad con Tico Molina, nuestra Directora de Digital, y el desarrollo del Connections Planning. Juntas y con el resto del equipo hemos ido estudiando e incorporando un modelo de connections / engagement integrado que ha sido muy valioso en la amplificación de campañas, tanto locales como globales y a escala.
Creo que este año demostró que los cambios sociales se relacionan y la transformación en realidad es una: ya sea la crisis de salud, el movimiento de Black Lives Matter, la igualdad de género, la conciencia ambiental o los derechos de los animales, creo que se destaca menos una sobre la otra y es más interesante lo que las une: el entendimiento colectivo de que no podemos estar en silencio o quietos y que “el momento es ahora”. Creo que la mejora de uno mismo y de la sociedad es algo que pasó a ser una inquietud de todos y que se les exige a todos. Ya no son los activistas los que luchan por las causas, activistas somos todos los seres humanos que queremos dejar al mundo mejor de lo que lo encontramos y al que no lo interesa pasa a ser un inadaptado, hoy es poco cool no cuidar al planeta o no luchar por los derechos humanos. La representación en la publicidad es una transformación que viene con mucha fuerza y de la cual me interesa formar parte. Las marcas y la comunicación tienen un poder enorme sobre cómo nos definimos a nosotros mismos y de lo que creemos que somos capaces. En temas de género, de raza, de clase, de edad, de discapacidad, etc., la comunicación nos llena de limitaciones o de posibilidades, y este debería de ser el punto de partida, el brief detrás de cada brief.
Lo que hace que mi trabajo sea interesante es ese balance entre lo pasajero o efímero y lo que nunca cambia, lo “timely y timeless”. Los insights están compuestos de verdades que se mueven dentro de este espectro. Y esto no lo dije yo, lo dijo el flaco Spinetta y se lo tomo prestado: “La energía de aquello que creamos tiene que coincidir con lo que está pasando en el mundo”. Hoy el mundo pide igualdad, diversidad, un respiro para el planeta; lo pide a gritos. Hay que embanderar estos temas sin importar qué marca somos y dentro de qué categoría jugamos; esta es la manera de ser no solo relevantes, sino trascendentes. A futuro me gustaría seguir formando parte de esa energía colectiva que nos está impulsando hacia un mundo más habitable para todos.
El año fiscal de Grupo Cepas comenzó el 1.° de abril y, con él, la ejecución de los planes de marca. El primer desafío y logro de este año fue la adaptación en tiempo récord de los planes de PR de nuestras marcas a un contexto desconocido y a las diferentes necesidades de nuestros consumidores. Con Gancia desarrollamos acciones (“Otra ronda”) para acompañar a los bares –nuestros socios estratégicos–, a las que sumamos a los bartenders exponentes de las barras para amplificar el mensaje. Con Terma tuvimos el desafío de estar cerca de los consumidores de manera virtual, reforzando el vínculo con mensajes relevantes. Realizamos dos ediciones de “Charlas con Terma”, un ciclo de encuentros virtuales hosteados por @paulinacocina e influencers que abordaban temas referentes al contexto y que proponían contenidos para el confinamiento. Dr. Lemon consolidó su squad de amplificadores, intensificó su presencia en el mundo del trap con acciones pensadas para nuestros consumidores centennials, como el festival virtual para el Día del Amigx, el partnership con Bizarrap y el sponsoreo a Buenos Aires Trap, el mayor evento de género urbano de Latam. Por último, asumí un nuevo rol en el que sumé la responsabilidad del área de medios, llevando adelante la planificación y estrategia de diferentes campañas para nuestras marcas. Sin dudas, uno de los hitos fue la creación y producción en conjunto con ViacomCBS de “Gran bartender en casa”, un programa que contó con 12 episodios que lideraron su franja en todas las emisiones y se ubicó en el top 5 de los más vistos de su jornada. Actualmente contamos con product placements especialmente producidos para “MasterChef Celebrity”, tanto para nuestro portfolio de Gancia y Aperitivos Argentinos como para Terma y su propuesta de recetas de jarras por Donato de Santis.
Los cambios en las formas de producir, difundir y consumir contenidos. Las crisis aceleran las transformaciones sociales y las respuestas que encontramos probablemente las terminemos incorporando. El home office, el e-learning y las compras digitales crecieron exponencialmente (en todas las clases sociales). Temáticas antes relegadas a grupos específicos o generaciones más jóvenes, como la toma de conciencia sobre los consumos sostenibles y nuestra relación con el medioambiente, han venido a instalarse en la agenda social de forma definitiva. En este proceso social en transformación, la comunicación, en general, es motor del cambio –se dan procesos comunicativos en los que se define ese cambio– y la comunicación de marcas, en particular, está en constante mutación. Por ejemplo, las marcas tienen que ser flexibles en sus estrategias, sus formatos, sus canales, entender y adaptarse a cuáles son las conversaciones de sus consumidores, generar contenidos que sean relevantes y sumen valor, no solo que repliquen consignas vacías u oportunistas.
Destacar el rol clave de la comunicación como motor en la construcción de identidad de las marcas. Por medio de la creación de red con otras mujeres, introducir la perspectiva de género en la comunicación de marcas en una industria que históricamente no la tuvo.

Sin dudas, el 2020 fue uno de los años más desafiantes de mi carrera, que a su vez me deja grandes aprendizajes y logros profesionales. Viéndolo en perspectiva, de hecho, los considero aun más valiosos por el contexto en el que se dieron. Desde lo personal, fue todo un reto poder conciliar la vida laboral con la personal, protagonizada por una beba de un año, y no podría dejar de mencionarlo como uno de los principales logros. Por otro lado, habernos adaptado de manera rápida, manteniendo el mismo ritmo, profesionalismo y calidad de trabajo que brindamos a cada uno de nuestros clientes, fue otra gran meta cumplida. Estoy realmente convencida de que cada logro alcanzado fue posible gracias al trabajo en equipo y al aporte de cada uno.
Tanto desde lo personal como desde lo profesional, siempre me interesó particularmente el cuidado del medioambiente y la sustentabilidad. Por suerte, en los últimos años este concepto fue adoptado por cada vez más compañías, entendiendo y asumiendo que la única forma de hacer negocios es basándose en la sustentabilidad como eje transversal, independientemente del sector o tamaño de cada organización. Al mismo tiempo, y en línea con promover el desarrollo sostenible, el cambio impulsado hacia un mundo con paridad de género es una transformación que no solo me interesa, sino que estoy convencida de su necesidad para lograr una sociedad cada vez más justa, con igualdad de condiciones, más que de oportunidades.
Al igual que en mi vida personal, porque no creo que se pueda ni deba diferenciar de la profesional, creo firmemente que el éxito está en la capacidad que tenemos de dejarle algo al otro. Pueden ser desde cuestiones más técnicas hasta emocionales, pero poder aportar cada uno desde su lugar y estar también abierto a aprender del otro, es como creo que se construye y potencia el desarrollo personal y laboral. Por eso, considero que saber y poder transmitir y trasladar lo que uno sabe es tan importante como los conocimientos o experiencias en sí. “Procura ser el tipo de jefe, compañero o cliente con el que te gustaría trabajar”: una tarea de todos los días, basada en la búsqueda por aportar valor desde mi lugar, con cada persona con la que trabajo.

El 2020 comenzó como un año más, pero en menos de un trimestre descubrimos que grandes desafíos nos iban a poner a todos a prueba y en muchos aspectos. Como profesional, debo admitir que estos tiempos me han demostrado el gran poder de adaptabilidad y la capacidad de hacerlo en tiempo récord. Estoy agradecida de formar parte de un team en donde todos tenemos el sistema de trabajo súper aceitado, lo cual nos permitió reinventarnos desde casa, para cuidarnos, pero manteniendo la esencia y haciendo lo que más nos gusta. Nos amigamos con la virtualidad como parte fundamental de esta nueva modalidad, y las distancias se acortaron permitiéndonos una comunicación fluida con clientes y proveedores, sin contar la interna propia del equipo, vital para darle seguimiento a cada uno de los proyectos.
Dentro de los cambios sociales, uno de los que más me toca de cerca a nivel profesional tiene que ver con las transformaciones tecnológicas y su impacto en la comunicación. Lo que se ha llamado “transformación digital” ha cobrado gran importancia en los últimos años, convirtiéndose en protagonista de las estrategias de la mayoría de las compañías. Cada diez años, aproximadamente, tiene lugar una revolución tecnológica que da comienzo a grandes cambios; y cada revolución ha influido de manera directa en la forma en la que trabajamos y nos relacionamos. Es por eso que la constante capacitación es la que nos mantiene en carrera, brindándonos las herramientas necesarias para adaptarnos al ritmo frenético de la tecnología y al reto de comprender las necesidades de las compañías para satisfacer los cambios de comportamiento de los usuarios.
Me gustaría poder contar mis aprendizajes y tropiezos, la metodología de trabajo que me ha funcionado a lo largo de los años, cómo optimizar los tiempos y mejorar los procesos. Compartir mi experiencia en el medio, deseando que la nuevas generaciones, al igual que yo, puedan experimentar el trabajo en un equipo en donde se respetan las decisiones de quien las toma, sin importar su género; que se animen a romper moldes, a probar cosas nuevas que no se hayan hecho aún, sin temer a que no salgan bien.

En este año totalmente atípico, uno de los principales logros como profesional fue participar en el rediseño de la estrategia de monetización de la compañía, la cual incluyó la redefinición de precios y acuerdos. A comienzos de año habíamos planificado la realización de grandes proyectos a nivel internacional. Incluso hasta días antes de que el Gobierno nacional declarara la cuarentena obligatoria realizamos varios viajes para plasmar dichos acuerdos, pero a raíz de toda la situación que se vive a nivel mundial, toda esa planificación se vio afectada y tuvimos que adaptar rápidamente todos nuestros planes, reevaluando nuestro foco y toda la estrategia planeada. Fue así como, en función del contexto actual, de manera ágil y rápida se redefinieron el pricing y el plan general considerando cómo se verían afectados los cambios en la inversión de nuestros anunciantes. El gran desafío que nos planteó el 2020 nos hizo crecer como equipo. Fue un trabajo increíble en el cual todos colaboramos aportando ideas y sugerencias, y frente a este camino incierto logramos superar los obstáculos saliendo más fortalecidos. Es así como estamos cerrando un año en el que, si bien no todos los objetivos inicialmente planteados fueron alcanzados, podemos afirmar que crecimos en un alto porcentaje con respecto al año anterior y logramos los números que habíamos reestimado. Y sin dudas, ¡la rápida acción que tuvimos como equipo digital y como gerencia fue determinante para alcanzar estos logros!
Para una compañía y, particularmente para un área digital como la que lidero, lo más importante es estar siempre a la vanguardia de lo que está sucediendo en la industria, tanto a nivel profesional como social. Muchas de las personas que trabajan en todo lo relacionado con lo digital son jóvenes que acaban de terminar su carrera, con menos experiencia profesional y otra visión del trabajo y de la vida en general. Considero desafiante y gratificante el poder acompañar a todos estos profesionales, sus deseos y ambiciones. Conocer al equipo en el que uno trabaja y entender sus necesidades, que son diferentes a las que tenía una persona de mi edad al recibirse, implican adaptación y empatía. En mi caso, es una transformación y aprendizaje constante el poder trabajar con personas a las que les llevo más de 10 años, quienes tienen otra forma de pensar, de motivarse y de resolver situaciones; es, sin dudas, uno de los desafíos que me permiten crecer como persona y profesional.
Me gustaría seguir aplicando la experiencia aprendida a lo largo de estos años, no solo en esta área, sino también mi experiencia analítica, de cuando trabajé en otras. Creo que en este momento de mi vida profesional, donde estoy terminando un MBA, puedo decir que estoy en condiciones de seguir aportando y adquiriendo conocimientos, y organizar nuevos equipos en los cuales podremos seguir creciendo juntos con diversidades que enriquezcan, pero unidos con objetivos claros y concretos que día a día nos vayan generando oportunidades de crecer como personas y en nuestra profesión.

Este año, mis logros profesionales estuvieron reflejados en el impacto que tuvieron las campañas que hicimos tanto con Stella Artois como con Corona y Budweiser. Con Stella Artois lanzamos la campaña “Ayudá un restaurante”, en la que ofrecimos ayuda a más de 1000 puntos de venta de todo el territorio nacional, en una acción que buscó apoyar a la industria gastronómica en un momento de crisis sin precedentes. También lanzamos Stella Artois Noire y una edición limitada que le trajo dinamismo y novedad a la marca en el punto de venta. Con Corona lanzamos “Viajes con conexión”, una iniciativa en la que compramos 1200 noches de alojamiento en más de 40 establecimientos a lo largo de nuestro país, con el objetivo de apoyar a la industria turística argentina en medio de la pandemia. Luego sorteamos estas noches de hotelería entre nuestros consumidores, para que las puedan disfrutar en 2021. Y, finalmente, logramos hacer un reposicionamiento de la comunicación estratégica de Budweiser, metiendo a la marca de lleno en el mundo fashion, pero también en el plano del fútbol internacional y premium de la mano de Lionel Messi, lo que nos dio un awareness y un impacto a nivel masivo en toda la Argentina.
En un año en que el mundo fue disrumpido por completo, no dejo de asombrarme por la enorme capacidad del ser humano de adaptarse y reaccionar ante la adversidad. Nuestra reacción ante el cambio, asociada a nuestra veloz capacidad de aprendizaje, logró resultados efectivos ante la adversidad en muy poco tiempo, pero también cambió la manera en que pensamos, sentimos, vivimos y nos relacionamos. Me interesa mucho entender cómo el mundo está cambiando debido a esta situación y cuál va a ser el impacto que tenga en nuestra manera de vivir en el largo plazo.
Me gustaría que el aporte de mi trabajo se refleje en dos planos. El primero, crear equipos colaborativos que sueñen en grande y que estén siempre fuera de su zona de confort. Es la única manera que existe para que las personas crezcan y, con ellos, los equipos logren cosas que creían imposibles. El segundo, desarrollar marcas a las que les sea cómodo operar de manera positiva en la cultura y que sean un reflejo de ella. Marcas con un punto de vista claro.

Decir que fue un año especial es caer en una obviedad a esta altura, pero es algo que no se puede esquivar a la hora de mirar para atrás. Creo que el mayor logro profesional, aunque pueda sonar raro, fue humano. Fue consolidar el equipo de Don, con una dinámica de laburo impensada a principio del año. Tuvimos la suerte de sumar gente al equipo y clientes nuevos para los que estamos haciendo un laburo muy interesante, con mucha construcción estratégica. Encontrar una nueva dinámica, que nos permitió estar cerca entre nosotros y de los clientes, respondiendo todos de una manera increíble y acompañándonos unos a otros en este contexto tan raro, sin dudas fue el gran desafío y el gran logro.
Hoy los grandes cambios sociales están atravesados, en general, por la tecnología y por las nuevas plataformas que surgen, y hay muchísimos lenguajes y códigos que nacen a partir de todo eso: lenguajes audiovisuales, nuevas formas de contar algo, pasar un mensaje o hacer un chiste. Me parece súper interesante. Es un desafío muy grande para todas las marcas aprender día a día a hablar estos lenguajes que los consumidores adoptan tan rápido.
Hoy las marcas están cada vez más cercanas al entretenimiento, al desarrollo de contenidos, a las acciones concretas para cambiar algo. Básicamente, porque es lo que la gente valora, con lo que conecta, y todas esas cosas contribuyen a dejar una pequeña (o a veces no tan pequeña) huella cultural. Creo que a todos, en el fondo, nos gustaría eso. Y trabajando en el mundo de las ideas, como trabajamos nosotros, el límite es el que nosotros mismos nos pongamos.
Sin lugar a dudas, el 2020 ha sido un año muy desafiante para toda la industria del deporte. Al comienzo era un año muy prometedor en relación a los distintos eventos deportivos que iban a realizarse, tales como la Copa América, los Juegos Olímpicos, el campeonato argentino, entre otros. La situación del COVID-19 me desafió, debido a que gran parte de mis proyectos quedaron en stand by y me encontré en un momento de reinversión para analizar cómo salir adelante. Considero que ese panorama incierto me llevó a reinventarme y sentí que alcancé logros que –sin el contexto que atravesamos– no hubieran sido posibles. Desde TNT Sports apostamos fuertemente a todo lo relacionado a e-sports, cerramos un convenio con los principales corredores de TC, TC2000 y demás categorías del automovilismo para crear ProDrivers, una competencia bajo la plataforma iRacing que nos permitió seguir teniendo contenido en vivo y de deportes que hasta el momento no teníamos en nuestra pantalla. De esta manera, logramos acercarnos a nuevos clientes y tener conversaciones con un nicho con el que, hasta el momento, no habíamos generado una relación tan profunda. Otro gran desafío de este año fue mantener la cercanía con todos nuestros clientes fidelizados, continuar teniendo una comunicación constante e informarlos a través de plataformas digitales, a pesar de esta nueva normalidad.
De acuerdo con el contexto actual, considero que un cambio que llegó para quedarse es el trabajo por objetivos, que además facilita la medición de resultados. El concepto de manejar tus horarios y tener diferentes espacios de trabajo me resultó favorable. Además, permite organizar y hacer foco en las prioridades. Por ejemplo, antes, las reuniones presenciales eran imprescindibles y, hoy, esa idea ya cambió, son virtuales y mucho más expeditivas.
En relación a la industria deportiva, área en la que me desempeño desde hace ya cuatro años, me gustaría hacer un aporte en la incorporación y profesionalización de nuevos deportes. Es decir, noto que hay muchos clubes con gran potencial y deportes que están surgiendo o son de menor envergadura que deberían tener mayor visibilidad. Un ejemplo es el fútbol femenino, que considero que se podría explotar mucho más y, sin dudas, necesita tener una visión más de negocio a largo plazo, con una planificación especializada e incorporación de sponsors que apuesten a cada equipo. A través de mi trabajo me gustaría poder profesionalizar aún más todo lo relacionado a deportes, sponsors y marcas.

Desde lo profesional, sin dudas el principal logro de este año fue haber ganado el premio Eikon 2020 en la categoría Sustentabilidad en Salud junto con nuestro cliente, la Asociación Médica del Hospital de Clínicas, por la campaña realizada sobre la donación de plasma para ayudar en la investigación y el tratamiento de personas afectadas por el COVID-19. Quiero destacar a una gran profesional y una excelente persona como lo es Chiara Vitelli, que trabaja conmigo como ejecutiva de cuentas y con quien hemos desarrollado una innumerable cantidad de campañas para diversos clientes, como Pirelli y Despegar, entre otros. Y, desde ya, a todo el equipo de la agencia y la consultora que han hecho posible este logro. El trabajo a la par con los médicos del Hospital de Clínicas nos dio un punto de vista más cercano y terrenal sobre los trabajadores y trabajadoras de la salud que día a día dejan sus vidas, desinteresadamente y por pura vocación, para ayudar a los demás.
Me interesan mucho aquellos cambios que amplifican y permiten la participación de la sociedad. Como comunicadores siempre tenemos la responsabilidad de escuchar para luego intervenir en la opinión pública. Creo que la pandemia ha marcado un cambio profundo en la aceleración del uso de medios digitales y en las nuevas tecnologías de la información. Hacia allá está yendo el mercado en los últimos años y, por ende, la sociedad. Las nuevas tecnologías y plataformas digitales generaron importantes transformaciones culturales en el mundo en los últimos 10 años y continúan en un dinamismo permanente. Creo que el concepto de la mirada 360° es cada vez más desafiante y nos obliga a estar en atención y capacitación permanente, absorbiendo minuto a minuto nuevos conocimientos. Desarrollar en la actualidad una estrategia de comunicación implica analizar cada vez más variables, herramientas, formatos, hábitos de consumo, comportamientos y los nuevos espacios púbicos de participación de nuestro target.
A veces no dimensionamos, en nuestra dinámica cotidiana y el microclima que se genera en la diaria, el grado de poder y responsabilidad que tenemos como comunicadores y publicistas, en todos los estratos de nuestra profesión. Pienso que esa certeza tiene que estar presente en cada una de nuestras acciones. Mi aporte hacia el futuro es continuar potenciando las causas nobles, tener la responsabilidad y la conciencia de que cuando nuestros mensajes intervienen en la sociedad tienen que ser valiosos y constructivos. Esto implica tener una percepción distinta, y ese es nuestro diferencial como agencia y consultora: enaltecer los buenos valores y encontrar los mensajes propositivos que nos fortalecen como sociedad.

Dado el contexto de la pandemia y el trabajo remoto, mantener el trabajo en equipo y los objetivos de todos los involucrados alineados. El distanciamiento social pareció un desafío en una primera etapa. El ambiente y las relaciones dentro de DIRECTV son muy cercanas y cálidas, por lo que la falta de contacto directo con el equipo y el resto de áreas fue duro en un principio. Haber adoptado la metodología Agile en 2019 fue de gran ayuda: cada miembro es lo suficientemente independiente para gestionar su roadmap de acción diario sin problema. A su vez, nos dejó una cultura de dinamismo que nos dio cintura para no desestabilizarnos con los cambios rápidos y readaptarnos. En mi caso en particular, trabajo con DIRECTV GO, la plataforma regional de streaming de DIRECTV. La velocidad con la que creció en toda Latinoamérica refleja el esfuerzo y el trabajo bien hecho de muchas áreas involucradas: producto, programación, research, analytics y marketing. Esta expansión definitivamente es un logro a nivel empresa y, asimismo, la considero como un logro personal.
Creo que fue un año muy introspectivo, el cual generó una sensación de loop, pero nos dejó tiempo de replantearnos aspectos que damos por hechos o arrastramos como sociedad. Hace años que el sistema educativo debió renovarse y adaptarse a la nueva realidad. Los cambios drásticos que obligó la pandemia lo dejó en evidencia. En los colegios y universidades, las temáticas y metodologías quedaron obsoletas en muchos casos. Estudiar textos de memoria y escuchar a un profesor desde un pupitre dando indicaciones con un pizarrón parece prehistórico. Hoy, gracias a la tecnología que nos acompaña a todos lados, contamos con toda la información necesaria a un clic. Las instituciones deberían enseñar a moderarla y a usarla correctamente. Por otra parte, el mercado laboral presenta muchísima oferta para perfiles más digitales: desarrolladores, especialistas de marketing digital, UX, etc. ¿Por qué no incluir estas materias si forman parte de una nueva realidad? Me impacta pensar en que me recibí de la universidad hace solo 8 años y todo lo que sé lo aprendí en la cancha. Es clave allanar ese camino y preparar a los nuevos profesionales para esta realidad.
El mundo del entretenimiento y los hábitos de consumo de contenidos están cambiando radicalmente, y DIRECTV acompaña esta transformación. Hoy me dedico exclusivamente a DIRECTV GO. Un envase diferente, con el mismo objetivo: brindar entretenimiento y servicio de calidad a las personas, en cualquier momento y lugar, a través de diversos dispositivos. Somos esenciales, especialmente en plena pandemia: brindamos distensión y entretenimiento, información y hasta educación a través del contenido. Pensar en que mi trabajo ayuda de esta manera, aportando al equilibro mental y de vida que las personas necesitan para ser felices en estos tiempos, es muy satisfactorio. En este sentido, estamos trabajando para ofrecer un producto que se ajuste a las preferencias personales de cada individuo del modo más customizable posible, llegando a una relación uno a uno con sus gustos y necesidades particulares.

Creo que el principal logro profesional en este particular año fue la capacidad de adaptación a un nuevo, desconocido e incierto escenario y, además, el abrupto cambio de planes sobre el final del primer trimestre. Una estrategia distinta, hacia un escenario completamente virtual –dejando de lado eventos, coberturas, reuniones presenciales, etc.– ha sido un gran desafío que pudimos sortear con éxito. Más allá de mi área específica de trabajo, represento a Latinoamérica en el Comité de Diversidad e Inclusión dentro de la compañía, y este ha sido un año cargado de desafíos y aprendizajes en este ámbito, con temas globales y locales: desde la colaboración en la revisión de la declaración de Black Lives Matter, que hoy se puede ver en el sitio de Getty Images, hasta reuniones locales más personalizadas con los equipos de la región. Por otro lado, en el mes de octubre fui seleccionada junto a otros colegas alrededor del mundo para participar del programa interno, NEXT, un proyecto de aprendizaje y desarrollo para empleados de alto potencial, un real privilegio del cual estoy muy agradecida.
Sin dudas, y dentro de la industria en la que trabajamos, me interesa el cambio –progresivo– en la representación visual, la evolución del contenido hacia una visión más inclusiva y realista, cercana a los consumidores y lo que ellos representan. Las marcas y medios pueden ser fuertemente castigados por los usuarios si no se comunica de manera honesta, transparente y real. Para establecer la confianza de la marca a través de la narrativa visual, los contenidos auténticos y verdaderos son fundamentales, y esto es lo que más me interesa promover. Si bien como sociedad nos encontramos en pleno proceso de cambio, creo que la evolución en este sentido es innegable y, dentro de Getty Images & iStock, promovemos la creación y utilización de estas imágenes, tanto en fotografía como en video. Colecciones como #ShowUs, Nosotros, Disrupt Aging y tantas otras dan cuenta de esto.
El aporte que me gustaría hacer es mucho de lo mencionado anteriormente: generar y promover contenido realmente inclusivo, cambiando la forma en que se representa el mundo en el marketing y la publicidad. Un trabajo duro por delante, pero no imposible, que ya demuestra alguno resultados. También me gustaría poder compartir la experiencia adquirida, transmitirla a quienes se encuentran comenzando sus carreras o aún no saben con exactitud a qué dedicarse. Trabajar de algo que realmente te gusta es posible, y disfrutarlo, también.

Este año estuvo repleto de cambios, de adaptación, de aprendizaje y también de logros. Naranja se consolida como ecosistema de productos y servicios, y continúa el camino de transformación, ese que iniciamos hace ya más de tres años (nosotros le decimos “evolución” porque la esencia es la misma que nos vio nacer). Crecemos en agilidad y todos los que formamos parte nos vemos desafiados y en movimiento, apostando a la entrega de valor continua. En el 2020 acepté un nuevo desafío: maximizar el conocimiento y el uso de todas las promociones y beneficios que tenemos para el cliente, tanto en comercios físicos como online, siendo oportunos y relevantes en cada contacto. Uno de mis principales logros fue formar, consolidar y liderar un equipo de profesionales multidisciplinarios que trabajan de forma colaborativa y coordinada, con autogestión. Hablo de un equipo que pone el foco en el cliente y su experiencia, y que sobre todo toma decisiones basadas en datos. Hemos obtenido resultados positivos impensados en términos de consumo y retención de clientes, en un contexto completamente incierto. Replanteamos el plan de medios por completo: el “cómo”, el “a quién” y el “cuándo”, con el cliente siempre en el centro. Nos animamos a probar cosas nuevas, experimentamos y estamos en constante aprendizaje. Otro gran logro profesional fue seguir colaborando en el fortalecimiento de nuestra cultura data driven, impulsando el uso de la analítica aplicada al negocio: desde la creación en la tribu de marketing de un equipo de insights, el acompañamiento continuo en la construcción y mejora de modelos, hasta la formación de todos nuestros analistas de marketing.
Celebrar y potenciar la diversidad, la inclusión, cambiar la mirada. Considero que nada enriquece más que escuchar todas las voces, poner en valor la diferencia nos enriquece como profesionales y como personas.
Creo que a través de mi trabajo puedo facilitarles la vida a las personas de muchas maneras. Por ejemplo, acercándoles lo que están buscando, brindándoles información oportuna cuando la necesitan, y escuchando continua y activamente.

El 2020 ha demostrado ser un año desafiante en todos los aspectos, y creo que es un año en el que los logros tienen otra manera de evaluarse. El principal logro fue haber tenido una rápida reacción de respuesta a la nueva realidad que planteó la pandemia: no solo porque nos adaptamos muy rápido a la nueva modalidad de trabajo a distancia, sino también porque tuvimos que reinventar nuestro paradigma de comunicación, de interacción con consumidores desde nuestras marcas. En mi caso, los planes de marketing de Grolsch y Warsteiner cambiaron y los adaptamos a un nuevo contexto: comunicaciones diferentes, con mensajes para interpelar a nuestros consumidores sobre lo que estaban viviendo en su día a día; un nuevo mix de medios y un mayor foco en el canal de e-commerce, que hasta entonces avanzaba lentamente en la compañía.
Personalmente, todos los cambios individuales y sociales que forzó la pandemia me impactaron profundamente. La hiperconexión del mundo, la inmediatez con la que suceden las cosas me hizo pensar en cuáles son los hábitos que tenemos incorporados y cuáles deberíamos cambiar. Tenemos que vivir con más conciencia el uso de los recursos y nuestro impacto en el medioambiente. La pandemia puede ser un anticipo de qué cosas pueden suceder cuando nuestro contexto cambia por efecto del hombre, afectando para siempre nuestra manera de vivir. Creo que si todos tomamos conciencia del impacto que generan nuestros hábitos y el daño que le estamos generando al planeta, solamente con pequeños cambios podemos marcar una gran diferencia. Así como hemos visto estos últimos años a los ciudadanos más conscientes por temas medioambientales y en cierta evolución con las nuevas generaciones de personas, los temas sociales vuelven a ocupar la escena, ahora amplificados por las redes y la globalidad, que hacen de temas nacionales algo mundial: economía, inclusión, racismo, medioambiente. Tanto desde lo personal como desde lo profesional, al gestionar marcas, se nos presentan como temas para atender.
Las grandes avenidas para generar un cambio desde nuestro trabajo en la industria cervecera son varias y diversas: desde la comunicación podemos sensibilizar y hacer conscientes ciertas problemáticas que en muchos casos se normalizan; cuando pensamos en el producto que llega a millones de personas, podemos ser capaces de pensar nuevas formas de generar energía renovable, packaging reciclable, reutilizable, opciones de logística con menos impacto. Las opciones son amplias y tenemos mucho por seguir haciendo. En lo personal, desde mi trabajo quiero contribuir y ser parte activa de ese cambio.

En este año tan particular, crecer profesionalmente y acompañar a di Paola Latina en su desarrollo en este contexto es mi gran logro. Instrumentamos el trabajo remoto con nuestros socios, los clientes. Además, mejoramos los procesos de trabajo internos en la agencia, y conseguimos agilidad para reinventarnos en un contexto adverso. Eso, sumado a la adecuación de las circunstancias particulares de cada integrante para poder dar lo mejor de sí, potenciándonos todos como un gran equipo. Crecí profesionalmente, sumamos más personas al equipo y crecimos en cantidad de clientes. Los resultados de este año me llenan de satisfacción.
Sin duda el trabajo remoto que llegó para quedarse y, con ello, la articulación de la vida privada con la profesional. Los nuevos hábitos laborales y procesos de trabajo son súper interesantes, aunque aún nos queda camino por recorrer y, en ese sentido, la búsqueda de eficiencia nos va a permitir ser cada vez mejores profesionales. A nivel social fue todo un desafío (y lo sigue siendo) contratar gente nueva sin antes tener siquiera una reunión en persona y hacer de las entrevistas virtuales la única forma de relacionarnos, conocernos y generar empatía. La percepción, en ese sentido, cobró un lugar fundamental. Siguiendo con esto y en lo que respecta a los que ya nos conocíamos, la interacción exclusivamente virtual nos permitió explorar otros aspectos y acompañarnos en estos tiempos. Además, las herramientas digitales llegaron a personas a las que, a priori, no les interesaban o creían que no podían usarlas. Se aceleró la digitalización que nos permite alcanzar de forma más eficiente a todos los targets.
Me gustaría llegar a más personas / clientes y demostrarles las bondades del marketing relacional y estratégico digital, en la búsqueda constante de resultados. Quisiera potenciar a mi equipo y a mis clientes, acompañarlos y, con mi trabajo, lograr que seamos todos cada vez mejores en lo que hacemos sin perder de vista al consumidor, cómo piensa, cuáles son sus necesidades y qué lo moviliza.

¿Qué cambios o transformaciones sociales te interesan más? ¿Por qué?
¿Qué aporte te gustaría hacer en el futuro a través de tu trabajo?
El año comenzó con algunos rumores de un virus proveniente de China, pero nada preocupante en ese momento…, mientras del otro lado del mundo, siendo Director de Medios de Peugeot me ofrecieron la oportunidad de hacerme cargo de toda la cuenta de Groupe PSA, una de las más importantes para Mediacom (mi primer logro profesional del año). Luego, como es de común conocimiento, llegó la cuarentena y nos hizo replantear la manera en que trabajamos y llevamos adelante a nuestros equipos. Por suerte, siempre conté con un grupo de trabajo compuesto por excelentes y comprometidas profesionales que hicieron posible mi segundo logro profesional del año: sortear situaciones inciertas y contratiempos que nos trajo la “nueva normalidad”. La coyuntura mundial del COVID-19 nos enseñó que el ser humano tuvo que adaptarse a un nuevo entorno. Tuvo que desaprender y aprender rápidamente, transformar hábitos, estereotipos y opiniones. Algunos lo habrán hecho en mayor o en menor grado, pero todos han respondido a las nuevas condiciones que esta situación trajo consigo. Hemos vivido en pocas semanas un vuelco en los comportamientos de búsqueda, los modos de transacción y las preferencias en los productos comprados como pocas veces en la historia. Es justamente esa agilidad y adaptabilidad de las sociedades las que encuentro sumamente interesantes y que enriquecen mí trabajo como comunicador. Por eso es importante que siendo líderes de equipos dejemos grabado, en quienes trabajan con nosotros, el futuro de la industria, la importancia de la comunicación y la versatilidad que deben tener para adaptarse a situaciones que escapan de sus manos, como una pandemia global.

Transitar este año tan particular, potenciar nuevos talentos y continuar superando objetivos creo que fueron los principales logros. Estamos transcurriendo un año que será parte de nuestra historia, por haber vivido una pandemia que nos llevó a repensar nuestra manera de hacer las cosas. Si tengo que mencionar otro logro, sería proponerme siempre el desafío de alentar, motivar y liderar desde la empatía, en todos los equipos dentro de los que me muevo. Como comunicadora, creo es esencial que impulsemos tanto la continuidad como la transformación del negocio, sea cual sea el rubro en el cual nos desempeñemos; que seamos agentes de cambio desde nuestro lugar, y ese fue otro gran desafío profesional que me propuse llevar adelante este año. Por último, no menos importante, este año sumamos otro premio por el caso de la última campaña de PR que presentamos, gracias al trabajo del equipo que me acompaña y acepta y lleva adelante cada nuevo desafío. El balance siempre es positivo.
Me interesan las causas que generan movimientos y siembran una semilla para las generaciones futuras, que implican transformaciones de impacto por las que ya no podemos volver a mirar el mundo con los mismos ojos. Creo que todos tenemos el propósito de dejar algo desde nuestro lugar, sea un aporte grande o pequeño. Si podemos alinear ese propósito a nuestra vocación, se genera un círculo virtuoso. No siempre es posible, pero los que tenemos la posibilidad de trabajar de nuestra vocación, en mi caso la comunicación, tenemos la obligación de hacerlo. Me interesa la sustentabilidad, entendida como concepto holístico: desde el cuidado del medio ambiente hasta la conciencia por nuestro impacto social en todo lo que hacemos. Lograr la coherencia social es el norte, pensar, hacer y ser; nuestra contribución positiva a la sociedad. Me interesan los movimientos sociales que se dan como rupturas de paradigmas y prenociones, que vienen a deconstruirnos; que pueden llegar como una tendencia, y luego se convierten en conciencia social; marcan un antes y un después. Para las empresas, podríamos decir que hoy sería imposible pensar otra forma de tomar decisiones que no sea pensando en el cliente. Además de todo el trabajo que se está realizando en términos de inclusión y accesibilidad. Creo que estamos atravesando una era de visibilidad extrema y de cambios radicales, de la mano de tecnología y la comunicación. Todos y cada uno tenemos el poder de generar cambios. También es clave generar espacios de diálogo, un lugar legítimo para poder expresar opiniones, siempre con respeto; nos compromete a contribuir para un mundo mejor para cada persona. Creo que ya estamos transitando esos cambios.
Me gustaría poder dejar el “modo beta / de prueba” como forma de trabajo, creo que hoy en día se lo enuncia más de lo que se lo practica. En muchos casos se sigue castigando el error, y no desarrollamos la tolerancia a la frustración. También, generar espacios de diálogo e integración de diversos equipos de trabajo con un propósito común. Promover el bienestar digital, para que podamos utilizar todas las herramientas que tenemos al alcance, pero con el mejor fin, optimizando recursos y tiempos. Comprender lo valioso de todo lo que comunicamos y evitar la circulación de las fake news. Podríamos decir que la pandemia se cura en parte con ciencia y con comunicación. Debemos trabajar comprometidos en la segunda, ser responsables de qué comunicamos, y cómo, aún más en esta situación que estamos atravesando. Otro aporte sería revalorizar y llevar la comunicación como lo esencial de todos los negocios, no como fin último para contar una historia, sino para crearla y transformar todo lo que hacemos. Creo que el aporte que cada uno puede lograr desde su lugar es descubrir que a veces, lo más simple, es lo más complejo para otra persona, y que podemos ayudar con una palabra a tiempo, una colaboración en un proyecto, escuchando activamente, y poniendo a disposición nuestro tiempo, que es lo más valioso que tenemos.
Este año fue súper positivo a nivel profesional, a pesar de haberlo atravesado en plena pandemia y de manera virtual. Por un lado, terminé una maestría en Business & Technology, y además tuve la posibilidad de sumarme a un equipo increíble, que admiro mucho y que lidera la transformación en Banco Galicia, pudiendo aportar mi experiencia sobre la automatización a escala. Como ejemplo, desde el Centro de Excelencia de Automation estamos evolucionando con nuestra asistente virtual, Gala, de manera que nuestros clientes puedan tener una experiencia omnicanal y facilitándoles la autogestión. Mediante herramientas de inteligencia artificial estamos logrando que cada vez pueda asistir en más temas, interpretando cognitivamente lo que el cliente necesita, aprendiendo y fortaleciendo una comunicación cada vez más cercana y asertiva. A su vez, creo que otro gran logro es nuestro modelo de automatización a escala que nos está permitiendo responder con muchísima rapidez a un contexto sumamente dinámico, donde necesitamos poder adaptarnos de manera ágil. Esto hace que, por ejemplo, ante cambios en los procesos por medidas regulatorias o picos de volúmenes transaccionales, como banco lo podamos resolver directamente de manera automática, evitando generar fricciones entre las necesidades de nuestros clientes y nuestro tiempo de respuesta.
Me interesa poder colaborar con la inclusión financiera y digital, habilitando oportunidades al acercar a las personas una forma simple y accesible de interactuar con el banco. Es importante aprovechar la tecnología para que podamos brindar experiencias diferenciales y personalizadas, para que cada vez más gente se acerque a la bancarización. Orientar la comunicación a lo mobile, para que todo aquel que tenga un smartphone pueda resolver lo que necesite y acceder a productos financieros, esté donde esté, me parece crucial. En nuestro país existe un gran porcentaje de la población que no forma parte del ecosistema bancario, y me parece que está habiendo mecanismos innovadores que podemos aprovechar para ir acortando esa brecha y generando oportunidades.
Desde mi rol, me parece que sería genial lograr que todo lo que pueda hacerse de manera digital y automática, se haga de esa forma; por un lado, para que la experiencia del cliente sea cada vez mejor y, también, para que los profesionales que forman parte de nuestros equipos puedan enfocarse en aquello que aporte valor, generando un círculo virtuoso. Creo que es importante estar a la vanguardia, entendiendo qué herramientas tenemos disponibles para hacer las cosas cada vez mejor, más eficientes y fáciles. Es clave la conexión estrecha que se genera entre la tecnología y el negocio, y me encantaría que temas como la inteligencia artificial o la robotización se conviertan en algo cotidiano y accesible.

Este ha sido sin dudas un año muy complejo. Sumado a lo que todos estamos viviendo producto de la pandemia, este año fui madre en el mes de marzo; por lo tanto, desde febrero hasta el mes de septiembre, estuve de licencia por maternidad. Considero que mi principal logro ha tenido que ver con dejar un equipo fuerte y sólido, que ha sabido sobrellevar grandes desafíos y sortear obstáculos de todo tipo. Es un orgullo trabajar con un equipo de profesionales que no solo se ha mantenido unido, sino que ha ganado nuevos clientes y acompañado a los actuales en un año muy particular.
Cualquier cambio que genere un impacto positivo en la sociedad me resulta interesante. Hoy vivimos en tiempos de grandes cambios, existe una mayor conciencia y la agenda de trasformaciones abarca el impacto ambiental, la igualdad de género, la inclusión, entre otros temas. Trabajar en comunicación y ser líder en un equipo me permite poder llevar adelante proyectos y participar de cambios significativos, no solo desde lo profesional sino también en el ámbito personal.
Me gustaría poder dejar una agencia que tenga todos sus procesos 100% automatizados con el fin de tener profesionales acompañando a sus clientes en cada uno de los procesos de comunicación, no solo abordando soluciones de medios sino participando en cambios y transformaciones. Poder trabajar dentro de cada una de las empresas que confían en nosotros guiando y generando proyectos con impacto social. Me gustaría que mi paso por la industria sea recordado por mi trabajo con las personas y equipos, logrando tener personas motivadas y entusiastas que busquen desafíos y a las que les guste involucrarse en cada uno de los proyectos.

Cerrando el 2019, listé mis metas para este 2020, pero como a todos, el mundo me puso el freno de mano. Decidí tomarlo y transformarlo, el famoso “barajar y dar de nuevo”. Como todo, no fue fácil, me capacité para poder generar respuestas ágiles a un contexto tan dinámico. Y aunque la distancia se interponga y aparezcan nuevos medios de comunicación, siempre mantuve la capacidad de observar y escuchar al otro; primordial para la búsqueda de resultados y la relación entre equipos y clientes. Desafiando lo imposible, filmamos comerciales por streaming obteniendo muy buenos resultados, campañas y lanzamientos que con mucho esfuerzo y sacrificio pudimos sacar adelante. Pero uno de mis mayores logros fue encontrar un equilibrio entre mi vida familiar y profesional. Disfrutar como nunca hubiese podido, a mi hija de ahora dos años, pudiendo verla crecer sin que nadie me lo tenga que contar. Esa es mi mayor satisfacción. Mi balance, a pesar de todo, fue un año que me sorprendió, me desafió y me brindó nuevas herramientas para prepararnos cada vez más hacia el futuro.
La diversidad e inclusión es lo que nos va a llevar a un mundo más equitativo, respetuoso e igualitario. Hay muchísimo por recorrer, debemos escuchar y ser escuchados, y que cada uno pueda generar sus aportes: esto es lo que nos va a hacer crecer como sociedad. Dentro de HSBC, formo parte del grupo multigeneraciones, donde el objetivo principal es generar vínculos entre las personas que permitan el intercambio de experiencias y talentos, fomentando una cultura inclusiva generacional. Me resulta súper enriquecedor formar parte de este grupo, donde realizamos actividades y dinámicas grupales que nos permiten aportar y apoyar a la transformación interna.
Este contexto de pandemia nos puso a prueba en la forma dinámica y vertiginosa en la que puede cambiar todo. Estos cambios en las reglas transformaron no solo nuestras actividades diarias, sino también nuestra forma de pensar. A todos nos afectó de manera distinta y generó la necesidad de ser más empáticos y solidarios para con el resto. Como responsables de comunicación, debe estar en nuestro ADN acompañar las distintas transformaciones que vayamos viviendo, acompañando a la sociedad, generando conciencia y construyendo los puentes necesarios para acercar soluciones.

Uno de los logros principales fue conformar un equipo nuevo en tiempos de cuarentena; lo que se traduce en trabajar sobre nuevos procesos de forma inmediata para estructurar al equipo, sin que el trabajo o los desafíos pierdan calidad. Sumado a este trabajo, este año lanzamos un proyecto de educación a distancia para toda la región de Latinoamérica, para uno de nuestros clientes, siendo uno de los desafíos más importantes del año porque trabajamos de una manera totalmente disruptiva con los usuarios, realizando un diagnóstico general que tiene efectos en la experiencia de usuario, en el desarrollo, en la generación de contenido pertinente y en el proyecto institucional en la gestión de conocimiento de la organización. Algo sumamente valioso, como lo es trabajar sobre su capital intelectual.
Desde mi rol, actualmente trabajo en fortalecer vínculos en el campo digital; que los equipos internos, los usuarios finales y las organizaciones comiencen el viaje de la transformación digital de una manera planificada y efectiva, aprendiendo a utilizar o implementar nuevas herramientas digitales, sin dejar de lado todo lo referido al vínculo, porque al fin al cabo no deja de haber personas de una pantalla a la otra. Esto es algo que vengo haciendo desde hace 5 años, y este año, con este contexto, se potenció mucho más mi tarea.
Desde hace varios años vengo pensando en cómo nos relacionaremos de acá a 50 años, donde probablemente la tecnología tenga más preponderancia de la que tiene hoy, y puntualmente cómo podremos seguir comunicándonos de manera efectiva. Me gustaría poder aportar conceptos que colaboren en repensar el vínculo digital y que ayuden a acercar a las personas cuando la tecnología sea el único medio, incluso para construir proyectos.

Sin lugar a duda, y seguramente al igual que todos mis colegas, fue la pandemia. Enfrentarnos a algo que nunca vivimos como sociedad. Por lo cual, este año fue una inmersión profunda en temas varios: gestión de crisis, comunicación interna, responsabilidad social y campañas de reposicionamiento, entre tantas otras cosas. Trabajar para una marca como McDonald’s representó el desafío de actuar rápido y sostener la confianza de nuestros públicos a lo largo de toda la cuarentena.
Una de las mayores transformaciones sociales que me interesan tiene que ver con la personalización, empezar a pensar en el otro como individuo. Esto se traslada a un cambio en las personas, en donde medimos más el impacto que puede tener lo que hacemos en el otro, desde empezar a separar residuos en casa hasta donar ropa que ya no se use a una familia que la necesita. Desde el lado de las marcas, se traduce en pensar estrategias que trasciendan el solo vender, llegando también a impactar positivamente en las personas y en el mundo que habitamos.
Comunicar es una herramienta que es muy necesaria, pero que pocos saben gestionar. En este difícil año, me encontré ayudando a amigas emprendedoras y pequeños negocios a armar estrategias para continuar el vínculo con sus clientes y públicos. En un contexto en donde todo pasó principalmente al plano virtual, me encontré ayudando a armar contenidos para redes sociales, redactando mailings, etc. Creo que en el futuro me gustaría seguir aportando mi granito de arena para que emprendimientos chicos puedan profesionalizar sus canales de comunicación.
La pandemia generó un escenario de incertidumbre para todas las personas, las marcas y los profesionales. Desde lo personal, lo que hasta marzo era para mí un panorama claro: qué buscaban nuestros clientes, en qué temas eran relevantes y a quiénes debían hablarles, había cambiado completamente. Este nuevo contexto me hizo reinventarme, salir de lo ya establecido para preguntarme “¿y ahora qué?”. Desde ya, no entendí este escenario como una meseta que debía atravesar y esperar que terminara. Mi mayor logro fue salir del statu quo y desafiarme todos los días a reaprender el “qué”, el “cómo” y el “para qué” de nuestros objetivos junto a mi equipo y clientes. Antes de todo esto, imaginaba la reinvención como un proceso de al menos un año; actualmente lo veo como una dinámica diaria, y esto me permite estar lista para lo que sea, que espero no sea otra pandemia. Este momento también fue una gran oportunidad, junto a mi equipo de trabajo, para conectarnos más allá de la virtualidad, ayudarnos, acompañarnos y potenciarnos. Entendimos y compartimos las realidades de cada uno y de cada una, y eso nos unió más que nunca. Estos esfuerzos y trabajo en equipo se reflejaron en distintos reconocimientos y premios, llegamos a ser finalistas en los premios Fundacom, ganamos un Eikon en una de las categorías más desafiantes (Campaña de Influencers) y creamos desde cero nuevos proyectos con clientes que hasta llegaron a contar con el aval del Gobierno nacional.
El principal cambio social que me interesa está asociado a la igualdad de género, que en los últimos años viene dando grandes pasos en nuestro país. Creo que desde la comunicación podemos aportar a esta transformación social para que en unos años ya no tengamos que preguntarnos cuántas mujeres hay en un directorio, porque se empiezan a ver hechos concretos. Nuestro sector tiene un rol protagónico en este proceso, cuenta con muchas mujeres promoviendo este cambio y trabajando para que las marcas adquieran esta visión y, desde su lugar, hagan un aporte sustancial. Por lo cual, trato de hacer tangible este compromiso en mi trabajo diario y en el vínculo con los clientes.
Me interesa ser un agente de cambio desde la comunicación. Más allá de aportarles valor a los clientes todos los días desde la consultoría, me gustaría colaborar con los cambios sociales. Como mencionaba antes, la igualdad de género es un tema que me preocupa y ocupa, y la comunicación juega un rol central en las sociedades para visibilizar un tema, instalarlo y ponerlo en la agenda, para que después los actores responsables tengan que hacerse cargo y responder ante ello. La comunicación, a través de sus distintas plataformas, permite que los temas se conozcan, que las opiniones parecidas se encuentren y que se pueda hacer más fuerza entre todas y todos. Gracias a las redes sociales, estamos en una era de crear comunidad. Para eso, junto a mi equipo ya estamos trabajando, por ejemplo, en un proyecto para acortar la brecha de género en el sector de las telecomunicaciones, articulando con empresas, organismos internacionales, organizaciones del tercer sector y hasta Gobierno. Ese es el camino que quiero seguir y al que apuesto todos los días de la mano de Feedback PR.
¿Qué cambios o transformaciones sociales te interesan más? ¿Por qué?
¿Qué aporte te gustaría hacer en el futuro a través de tu trabajo?
El 2020 nos sorprendió con un destino impensado fuera de la ficción; un virus, el aislamiento y el miedo nos obligaron a repensar el mundo como lo creíamos y, de algún modo, a reinventarnos. Transformar el espacio de trabajo de lo grupal a lo individual fue un desafío. Pasamos de un ámbito donde el trabajo era compartido y consensuado, que se nutría de lo grupal, a resolver ciertas cuestiones de forma más autogestionada. Entiendo que esta es la mayor ganancia de estos meses a nivel laboral. En función de la pandemia, desde Supercharango desarrollamos la música para varios de los spots que el Gobierno nacional lanzó como informador y concientizador de la problemática actual; este me resulta el lado más amigable de la publicidad: su utilización para comunicar ideas que llamen a la reflexión y colaboren con la construcción de un mundo que se está transformando y necesita de manera imperiosa romper con construcciones que atrasan a las necesidades actuales. Es fundamental poder explotar de manera beneficiosa el potencial que la publicidad y lo audiovisual tienen en la modernidad. Donde el pulso es marcado por las tendencias, es sumamente necesario lanzar ideas con contenidos transformadores, resignar el mundo a través del medio que más convoca, la pantalla. Cuando surgen proyectos con este tipo contenidos, el desafío y entusiasmo es mayor. Aportar, desde el lugar que se pueda, a deconstruir estereotipos es gratificante.

En un entorno cambiante, mis principales logros fueron aportar de forma continua a los equipos de marketing una mirada de contexto y poder adaptar los planes de investigación a las necesidades que la empresa fue presentando. Adoptar y adaptar ágilmente fue y sigue siendo un enorme desafío.
Me interesan aquellos vinculados a la infancia (socialización, alimentación y nutrición, educación, diversión, etc.), porque son los que moldean el futuro y, por lo tanto, es clave comprenderlos.
Cada vez que hacemos un estudio o leemos las tendencias del mercado, además del aporte técnico, creo que llevo en las venas la mirada social; lo que le pasa a la gente, en su rol de consumidor / comprador, pero también de individuo inmerso en un contexto social complejo. Las empresas son enormes actores de transformación y si quienes trabajamos en ellas podemos leer lo que les sucede a las personas para pensar soluciones acordes, eso ya es un aporte.
